. Guía nuestro buen camino.
. Estimula buenos sentimientos y pensamientos.
. Con susurros nos indica lo que debemos de hacer.
. Nos protege física y espiritualmente.
. Nos advierte cuando hay peligro.
. Eleva nuestras virtudes.
. Aleja las fuerzas del mal.
. Lleva hacia dios el ofrecimiento que debemos hacerle de cada instante de nuestra vida. También las oraciones, sacrificios y todo lo que hagamos debemos entregarlo al Padre a través de nuestro ángel guardián.
. Anota nuestras buenas acciones.
. Nos acompaña a la hora de morir y lleva nuestra alma al Cielo.
. Trabaja con los otros ángeles para ayudarnos a nuestra evolución.
. Ora por nosotros.
. Nos enseña cuándo debemos ayudar a alguien.
. Acude cuando lo llamamos. Es importante comunicarnos con el mentalmente, para obtener su respuesta debemos tener fe de que nos escucha.
. Intercede por nosotros ante el Padre.
. Establece comunicación con otros ángeles guardianes cuando le solicitamos que nos ayude a calmar un ambiente tenso, una dificultad o alguna discusión.
. Frente a una enfermedad nos ayuda a sanar y cuando hay una intervención quirúrgica , puede asistir a San Rafael mientras él opera. Esto debemos de pedírselo con tiempo para que él y otros ángeles den la sabiduría necesaria a los médicos y a las enfermeras.
. Cuando hay un embarazo, la madre puede establecer una comunicación del ángel de ella con el de su hijo, generando una relación estrecha entre éstos, lo cual permitirá la unión familiar.
. Si se lo pedimos, él nos ayuda a evolucionar mientras dormimos y nos enseña nuestra vocación humanitaria.
. Nos corrige con amor cuando infringimos la ley divina.
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